‘El Caballero Oscuro’, el mejor superhéroe de todos los tiempos

Mido las palabras al hablar de obra maestras, ya hay quien la eleva por encima de Heat o Infiltrados, no sé la necesidad de comparar, cuando no tienen nada que ver. Todo sin hablar del Top #250 de IMDb donde la colocan delante de El Padrino, en el primer puesto, seamos sensatos señores. No soy persona de cómics ni adaptaciones de los mismos, tengo que admitir que me ha encantado y le doy un diez, pero eso no quita que cada uno tenga sus gustos y aunque TDK sea la gran triunfadora del 2008, yo sigo teniendo a Antes que el diablo sepas que has muerto o a Interview como mis número uno particular. Luego están los que dicen que es lo mejor que han visto lo que llevamos de siglo y otros entre las diez mejores de la historia, señores dejémonos de fanatismos, no tiene sentido decir estas cosas. Comparaciones y mediciones aparte adentrémonos en la película.

Está continuación de Batman Begins y segunda parte de la trilogía Nolan es un acierto en muchos aspectos, esta es de esas películas que tienen promoción casi gratuita pues hay muchas masa social tras Batman, la proyección en Cannes sirvió para que los críticos la elevaran al cielo y las expectativas eran máximas, lo mejor de todo es que cumple esas expectativas y eso contribuye a la larga resaca taquillera. La desafortunada muerte de Ledger sin quererlo, le ha servido para convertirla más en mito.

Los hermanos Nolan, tanto Christopher como Jonathan son los grandes artífices de está obra, el guión es una auténtica maravilla y eso es difícil de decir de este genero. La lucha entre el bien y el mal, la fragilidad de los cimientos de una sociedad donde el bien no va emparejado a seguir el camino recto. Una personalidad desestabilizadora como el Joker, una persona que disfruta viendo sufrir, llevará al límite a dos hombres. Toda una revisión filosófica al concepto de heroísmo, todo con más profundidad de lo que cabría esperar. Un argumento apasionante donde el espectador se preocupa más por los personajes que por la historia.

El nivel general del reparto es sobresaliente y sorprendentemente Ledger le arrebata el protagonismo a Bale de una manera asombrosa, la interpretación de Ledger en versión original es sublime, cuestiones personales aparte, es de Oscar. Este nuevo Joker, inspirado en The Killing Joke de Alan Moore, profundiza en un personaje lunático, desaliñado, punk, desquiciado y perverso, donde la muerte de Ledger dará pie a múltiples leyendas urbanas. Yo quedé sorprendido, ni le reconocí, se esconde perfectamente tras el personaje y más que una actuación parece que Ledger es el mismísimo Joker.

Aaron Eckhart eclipsa cada vez que entra en escena, a la vez que un Christian Bale más maduro es el perfecto para encarnar tanto a Bruce Wayne como a Batman . Con el señor Michael Caine hay que quitarse el sobrero, su minimalismo y pose inglesa hacen de él el perfecto para el papel, un actor secundario de lujo. Por otra parte Gary Oldman se enfunda el papel de Gordon de forma pasmosa. El único punto de desnivel lo pone Maggie Gyllenhaal, con una actuación que no convence al no estar al nivel del resto.

Estéticamente hablando también roza la perfección, huye del abuso de CGI, usandolo justo en los momentos necesarios. Es difícil ver que este tipo de películas se oponga al abuso de efectos especiales y a la búsqueda del entretenimiento fácil de explosiones o persecuciones sin sentido. La fotografía del film es todo un acierto, aportan elegancia dándole una gama de azules a las escenas nocturnas.

Alucinante como se acortan las dos horas y media de duración. Estamos ante una firme candidata a triunfar en los Oscar, ante lo mejor que jamás se ha hecho de un superhéroe y ante algo que hará que las películas de Marvel se tomen menos en serio. Los Nolan están llamados ha hacer historia en el cine. The Dark Knight ya lo ha hecho.

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