A lo largo de la historia del cine, Pablo Picasso ha contado con multitud de rostros. Anthony Hopkins, Brian Cox o el argentino Marcial Di Fonzo Bo (en Midnight in Paris) han sido algunos de los que han tenido el honor de inmortalizar en celuloide al gran pintor español. Sin embargo, a Antonio Banderas, malagueño más internacional desde Picasso, nunca le habían dado la oportunidad de dar vida al autor que nació a cuatro calles de su casa. Después de navegar por las vidas de Goya y Buñuel, el veterano Carlos Saura será el encargado de transformar a su protagonista de ¡Dispara! en el padre del Guernica.
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