
Diez años sin Billy Wilder
Cuándo Fernando Trueba recogió su Oscar por Belle Époque acuñó una frase mítica a la que muchos cinéfilos nos apuntamos de inmediato: "Me gustaría creer en Dios para agradecerselo, pero yo sólo creo en Billy Wilder, así que gracias señor Wilder." Al día siguiente Trueba recibió una llamada teléfonica, era el mismo Billy Wilder que le dijo: "Hola Fernando, soy Dios". Michel Hazanavicious también citó a Wilder cuándo se llevó su flamante estatuilla, desgraciadamente ya no pudo haber llamada de Dios. Sus conocidos dicen que así era Wilder, rápido, inteligente, mordaz e incapaz de que la verdad le arruinara una buena anécdota. Como puede mostrar el epitafio en su lápida que muestra la imagen de cabecera.