
Nadie conoce las claves que aseguran salir victorioso de la larga carrera al Oscar, lo único que se sabe a ciencia cierta es que tienes que exponerte a la vida pública, con el objetivo de que los medios y los académicos conozcan tu trabajo. Algo que Natalie Portman está siguiendo al pie de la letra, quizás hasta la extenuación. Al éxito de crítica y público de Cisne Negro y su asegurada nominación (y posible victoria) habrá que sumar en los primeros meses del año el estreno de dos muy diferentes comedias, seguidas por un drama independiente largamente retrasado y una super-producción veraniega sobre el dios nórdico más famoso del mundo super-heroico. Por si su vida profesional no fuera suficiente, la joven está dando tema de conversación a la prensa sensacionalista gracias a su feliz compromiso y aparente embarazo.
No Strings Attached, conocida anteriormente como Friends with Benefits, es el último proyecto del director Ivan Reitman (Ghostbusters, Twins), una comedia romántica protagonizada por Ashton Kutcher (Killers, Efectos personales) y Natalie Portman (V de Vendetta, Closer), en la que dos amigos se ponen de acuerdo en tener relaciones casuales, pensando que pueden hacerlo sin que nazca entre ellos ningún tipo de sentimiento. Pero, finalmente, el amor se interpone en su camino, y deberán decidir si son capaces de seguir llevando este tipo de relación.