Las modas son cíclicas, y en Hollywood más. Ya estamos acostumbrados a que nos presenten temas similares o idénticos cada poco tiempo. Si hace unos meses podíamos ver una (penosa) adaptación del mito de Hércules, ahora llega a nuestras pantallas otra más, con el aliciente principal de su protagonista, Dwayne Johnson.
Steven Spielberg no tiene demasiada práctica adaptando obras teatrales, pero parece que haberse arriesgado a llevar al cine War Horse puede ser un gran acierto. Gracias a su ojo clínico para elegir material que puede funcionar en celuloide, ya sea literario o en esta ocasión teatral, su próximo gran drama histórico se levantó ayer con los cinco premios Tony a los que optaba. La adaptación de Broadway de esta obra nacida en el West-End londinense se fue a dormir con los galardones correspondientes a Mejor obra teatral, Mejor dirección, Mejor diseño escénico, Mejor iluminación y Mejor sonido. ¿Un anticipo de los Oscars del año que viene?
Todavía a un año y medio del estreno de su The Adventures of Tintin: The Secret of the Unicorn, el infatigable Steven Spielberg ya ha comenzado a pensar en su próximo proyecto, un film alejado de sus últimas superproducciones que lo lleva hasta Inglaterra, la Primera Guerra Mundial y un caballo perdido. Basado en la novela y reconocida obra de teatro londinense War Horse de Michael Morpurgo, el film sigue la historia del joven Albert cuando su amado caballo Joey es vendido y llevado hasta Francia. Este hecho dará comienzo a una aventura que lo lleva al epicentro del fuego enemigo en el comienzo del conflicto, una extraordinaria odisea de enfermedad y destino con las que sirve a los dos bandos antes de encontrarse en tierra de nadie, sin su caballo y sin poder alistarse en el ejército.
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